Lanzamiento Revista Kabái Ed. 23
El próximo 30 de Enero de 2020 será lanzada en la Universidad Nacional de colombia sede Medellín y abierta a todo público, la Revista Kabái, edición 23 Poder y Territorio en America Latina
Desde su conformación, la Revista Kabài surge de la reflexión crítica sobre el programa de Economía en la Sede Medellín y alrededor del quehacer intelectual en general, desde entonces este ejercicio dialéctico ha sido el núcleo de nuestras ediciones. No exentos de recibir cuestionamientos, cada número publicado fue y será considerado en relación a su contenido como capaz de expresar, analizar y subvertir nuestro contexto con el propósito de transformarlo. Además, durante el curso de cada edición, una de nuestras prioridades es la participación en el movimiento social, porque nos distanciamos de la producción de conocimiento que se hace de espaldas a su comunidad y contexto, y porque es allí donde reside el mayor potencial emancipatorio.
Considerando absurdo pensar una temática ajena a nuestro entorno, vemos cómo en números anteriores se ha escrito acerca del agro, de la ciudad y el desarrollo o de la guerra, contenidos de los que es indudable su determinante cercanía, en especial aquella última, la que hemos recibido como herencia al igual que millones de colombianos, en nuestro caso a través del inolvidable asesinato hace más de 11 años del entonces integrante del Grupo Editorial de la Revista, nuestro compañero Martín Hernández. Un Martín que siempre desechó la distancia frente al «objeto de estudio» que promueve la academia, combinando reflexión inte- lectual con participación social, un Martín del que nunca dejaremos de reivindicar la labor pedagógica y organizativa en los territorios excluidos de la ciudad por la cual vivió y fue asesinado, y de la que algo se expone en su artículo Sin tierras y sin techos (Presente en nuestra edición 17 La Guerra, 2008, p.53-70).
De su legado incorporamos la constante autocrítica de la posición privilegiada que se asume desde la academia (que asumimos las y los universitarios al integrar la universidad, ya que nos permite teorizar o investigar, sin necesidad de «comprometernos»), e integramos, a la cercanía contextual de los contenidos, la puesta en práctica de actividades y procesos en el marco de la investigación, pero también de la participación y por qué no, de la transformación social. En ese sentido, la presente edición resulta especial dado que el aprendizaje sobre el territorio y las prácticas de poder en él, ha suscitado una mirada más amplia en cada uno de nuestros integrantes, y más aún, reformulado nuestra forma de habitarlo, encaminándonos a un trabajo colectivo que se nutre por nuestras diferentes perspectivas y que se visibilizó en mayor medida en el barrio Nueva Villa La Iguaná, marcando el reinicio de una relación ya «empolvada»; una relación que, desde la administración de la Universidad e incluso en muchos de sus habitantes, ha fluctuado entre indiferencia y exclusión.
Continuando con el trabajo urbano y de articulación con otros colectivos y procesos barriales, así como de coherencia con el enfoque y sector al que nos dirigimos, hemos hecho parte del proceso de articulación de diferentes colectivos que propenden por desarrollar un trabajo de medios abarcando el territorio regional en la Alianza de Medios Alternativos (AMA), alianza que tiene como objetivo develar el tejemaneje de los poderes y emporios del territorio, además de informar aquello que los medios oligárquicos ocultan con el fin de servir a los intereses de sus amos, sirviendo así como un medio para la divulgación de contenido popular y de los conflictos a los que diariamente se ve inmiscuida la clase obrera por el desarrollo material e ideológico del capital.
Así mismo, como miembros de la comunidad universitaria y en relación con el Movimiento estudiantil, “La lucha estructural” o “la lucha coyuntural” siempre se ha presentado como una de las grandes paradojas del Movimiento. En el 2018 con la UNEES (Unión Nacional de Estudiantes de la Educación Superior) por la financiación de la educación superior, lo coyuntural ha primado y ha desdibujado de nuevo el impulso hacia transformaciones profundas. Las causas, entre ellas encontramos un desconocimiento generalizado del funcionamiento de la sociedad en lo concerniente a educación, ciencia y relaciones de poder, la incapacidad de llevar a la práctica razonamientos críticos, el seguir los libretos ya conocidos (paro, pliego, mesa, acuerdos) y caer en los mismos errores del pasado, la desarticulación promovida por las prácticas vanguardistas mal llevadas de las organizaciones estudiantiles con sus intereses egoístas y dinámicas de cooptación, la poca capacidad pedagógica de los liderazgos que asumen las tareas de la colectividad, el romanticismo hacia las “bases” que termina aboliendo la autocrítica de las mismas. Aún así como Revista estamos convencidos del rol estratégico que cumple el sector estudiantil en las luchas sociales y su papel activo y protagónico en la confrontación con los poderes establecidos. Es por esto que alentamos la discusión tanto teórica como práctica para la consolidación de un Movimiento articulado internamente y con el resto de la sociedad.
Para terminar esta Presentación no podríamos dejar a un lado un tema que nos parece preocupante. Enfrentarnos a la desfinanciación ha sido una constante en cada edición, pero conforme avanza el tiempo, se acentúa tal problemática; la masificación de la Internet ha traído consigo el predominio del formato digital bajo el velo de la “democratización de la información”, la interconexión entre los territorios y el de ser una alternativa ecológica; sin embargo, la realidad difumina el velo, por ejemplo, el caso Assange y el de Alexandra Elbakyan son solo ejemplos del riesgo político que implica poner a disposición pública la información sensible en Internet; sobre los esfuerzos del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MINTIC) de “llevar internet hasta el último rincón de Colombia” nos preguntamos, si ni siquiera existen las estructuras físicas básicas en gran parte del territorio colombiano para el uso de la internet, ¿qué se va a interconectar?, ¿los procesos productivos y estatales ajenos a las costumbres e intereses de sus habitantes?; respecto al impacto favorable en el medio ambiente tenemos claridad de la necesidad tanto del cambio estructural que permita una relación diferente con la naturaleza como un cambio en nuestras prácticas diarias, no obstante, no debemos creer ciegamente, pues la producción de CO2 (gases de efecto invernadero,) que reproduce un archivo digital es significativa frente a la que produ- ce el “almacenar” la misma información en un medio físico.
Convencidos de la necesidad de comprender el fenómeno de la Internet en contexto políticoeconómico, no despreciamos el conocer las herramientas informáticas que posibilitan el acceso público a la formación e información, ni nos negamos rotundamente a la posibilidad de las ediciones digitales de nuestra Revista, incluso, al caer en cuenta de ello, hemos empleado diversas herramientas de libre acceso, tal vez la más importante para nuestro proceso editorial ha sido Scribus, un programa especializado para la diagramación de contenido literario creado y soportado por una comunidad que enarbola la libertad del conocimiento con la cual se ha realizado la diagramación de esta edición 23. Más bien, nuestra crítica la dirigimos, por un lado, a la falta de discusión y decisión unilateral sobre la digitalización como un proceso de homogenización de las publicaciones estudiantiles de la Facultad, y por otro, al desprecio institucional que se ejecuta a través de la supeditación de la Revista al Centro Editorial de la Facultad (con el cual es confusa e inexistente la articulación), eliminando el trámite directo y el traspaso directo de recursos por parte de la Universidad.
Esta situación la traducimos como el desconocimiento de los 20 años de existencia de Kabái de quienes, al asumir lo directivo, operan -o son operados- a través de las lógicas del mercado y de la privatización. Por nuestro lado, celebramos nuestros vigésimo aniversario con esta edición 23 Poder y Territorio en América Latina.